viernes, 27 de julio de 2012

EL MAL ESPAÑOL (Página nº 1191)

Dicen que es la envidia, superado ya aquel referente histórico de que el mal español era la sífilis, pero no, es la trampa, el ardid, la treta, la farsa, el amaño, el fraude, el embuste. Toda esa ristra de variantes de la mentira y la trapacería. Lo estamos viendo, por enésima vez, en ese ejercicio de falacia insoportable en que se convierte cada una de las comparecencias en la comisión de investigación parlamentaria que se están llevando a término en el Congreso para hacer el paripé nuevamente, no resolver absolutamente nada y gastarse una pasta añadida.

¿Recuerdan alguna comisión de investigación promovida por el Congreso, durante este periodo democrático, que haya servido para algo, por mínimo que sea? O mi memoria es muy corta o  no encontrarán ejemplos reales que determinen la verdad en esa pantomima bufa en la que todos nos cuentan lo buenos que son, lo honesto de su comportamiento, lo maravilloso de su gestión, y culpan al mar, el viento o el sol de lo sucedido. Montamos esta farándula en la que nadie cree porque quienes la organizan tampoco tienen el deseo real de descubrir nada, que además cuesta un dinero, más para limpiar imagen que para buscar honestamente delimitar responsabilidades políticas y conseguir que el bochorno no se repita, y por eso vemos a sus protagonistas, todos políticos puestos ahí por otros políticos o no políticos pero aupados por estos (Rato, Ordoñez, Salgado, Serra, Gayoso, Hernández Moltó, etc...) subiendo llenos de soberbia a contar lo bien que lo hicieron, la normalidad de todo y la gestión intachable, actores de la gran mentira, del mal español que encarnan, sobre todo, la casta política, origen de todos los males.



Sinceramente, que otorguen medios y autonomía real a policía y fiscales, y ya veríamos como las responsabilidades asomaban, de arriba a abajo, derribando esa mojiganga de embustes, medias verdades, poses ficticias y malos actores que estamos soportando, que sólo sirven para encanallar más a los ciudadanos, porque esta parodia eximirá a todos de responsabilidades, ¡está cantado!, reforzará el mal español y proveerá de nuevos escándalos en el futuro la impunidad de estos impresentables que nos han conducido a la ruina con su incompetencia y sus malas prácticas.

La envidia, ya digo, con ser despreciable, no causa tanto daño como este mal español.

4 comentarios:

  1. http://elcomentario.tv/reggio/hacia-el-gran-pacto-de-estado-de-luis-maria-anson-en-el-mundo/24/07/2012/

    Este artículo es de Ansón, que no es nada sospechoso de yayo flauta o indignado y explica muy bien lo que está pasando y da algunas opciones para evitar lo peor.

    Es muy interesante.

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  2. Boicotean un pleno y persiguen al alcalde de vinaròs.

    Esto es lo que hay que evitar. Estamos jugando con fuego. No podemos actuar tan egocéntricamente y destruir todo a nuestro alrededor pora salvar nuestro culo. Están en juego la subsistencia de mucha gente y todos debemos arrimar el hombro. Todos. Incluidos los hombres/políticos de bien. Si la violencia se generaliza los que perderemos seremos los de siempre, nosotros. Si hay que protestar se protesta, que todo el pueblo salga a la calle, pero pacíficamente. En paz.

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  3. la izquierda siempre inciendiando, siempre siempreése sí que es el mal de este país.

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    1. El mal de éste pais es pensar como tu lo haces. Estas palabras que acabas de escribir sí engendran violencia.

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